miércoles, 6 de febrero de 2013

Saque la sortija: Una vuelta gratis

Cancion obligada: http://www.youtube.com/watch?v=eElH05dcrzs&list=PL2CDF791CC13640B0


Por concepto de una persona feliz, casi que entiendo que es alguien que se entiende y se acepta a si mismo. Es completo y no le falta nada ya, solo debe seguir la trayectoria de migas que sus sueños y deseos le otorgan.

Una persona sin adquirir nuevos vinculos sociales, nuevas posesiones, nuevos hobbys, puede pasar de ser una lacra a una eminencia. Puede hacer de su infierno su tierno hogar, sin modificar una sola cosa. Sin quitar ni una persona, sin mover ni una silla.


De esto no hay escuela, cada quien va a su ritmo. Algunos ni lo buscan ni les interesa, pero ese sin duda no es mi caso, ni me interesa hablar de los que siempre me quejo en esta oportunidad, pero hay que hacer un apartado a quienes esto solo les parecen bobadas: Pobres de ellos, y pobre de mi. (Una relacion lose - lose, no pense que existiria, ¿como teniendola en la cara no la vi antes?...)

Personalmente es lo que mas me interesa, y venia con un envion interesante, hasta que note que tenia una falta de inspiracion. Hoy se me presento el jefe del stage por el cual voy, en este juego de entenderse.

Viendo por ""casualidad"" [casualidad un choto] un capitulo de Cowboy Bebop que habia visto varias veces antes, pero que desde la primera me hacia revolver el corazon, se me vinieron a la cabeza un par de cosas, secuencias, sueños, objetos.


Tengo todavia una parte a la que le tengo mucho miedo, que no puedo aceptar. No quiero aceptarla, creo que nadie deberia aceptarla, pero seria inmensa mi alegria si alguien lo hiciera a pesar de que este tan mal. Y no es que pueda describirla para que un receptor me ampare, sino que tendria que escucharlo de alguien mas para decir "SI, ES ESO" y poder sentirme comodo como dentro de mi misma placenta.

Es uno de los puntos mas gelatinosos de mi ser, donde me haria fanatico de quien sepa tranquilizarme amorosamente en ese momento de debilidad, donde siento que el corazon se me separa en 50 pedazos.
Pensar en la no aceptacion de esa parte, y de que nunca va a ser aceptada, me recuerda a lo que siento a veces cuando veo una calesita, estoy en cierto tipos de feria y veo algunos muñecos en especial, o recibo un regalo que no es para nada de mi agrado.
-Con toda la buena intencion de que puedas divertirte con algo hecho para eso, no te divierte. Con toda la buena intencion de otra persona que busco algo para darte, que no te causa regocijo alguno.

Me vienen a mi mente al pensar en este sentimiento, fragmentos de 3 pesadillas. Una mas terrorifica y desesperante que la otra, directamente proporcional a lo interesantes que me resultan.
Estas fueron:

-A los 6 o 7 años: Dos compañeros carenciados disfrazados de payasos, haciendo sus gracias por la calle (gracias...... gracias MUY agresivas y EN TODO SENTIDO, mientras yo constantemente los veia de frente, y siempre estaban a una determinada cantidad de pasos de mi)

-A los 7 u 8: Donde quedaba atrapado sin posibilidad alguna de escape en un escondite secreto que tenia, al cual solo se podia acceder por medio de un truco magico que yo solo sabia. Nadie sabia que estaba ahi y el truco dejo de funcionar para volver.

-Hace un par de meses: Donde dentro de un sueño en el cual el mundo ya estaba completamente desierto y perdido,  tenia un flashback de una gran catastrofe acerca de como fue el comienzo de la completa perdicion de ese lugar:  Trataba sobre un acto escolar, donde antes de que comience, invadian una especie de goblins con mascaras y armas muy primitivas, (pero con la fuerza de una locomotora), que ayudados por las ramas de los arboles (pertenecientes solo ese dia al patio) que caian prensiles desde el cielo raso, atrapaban a mis compañeros, para propinarles junto a los goblins, algo similar a una muerte sanguinaria, mientras sus padres huian de la escuela. Yo corria de todo eso, pero ni las ramas ni los goblins parecian interesados en mi, solo veia caer a mis compañeros sin hacer mas que correr inutilmente, pero ni podia ayudar, ni podia estar seguro que no iban a venir por mi. Fin del flashback.
Despues de muchos sucesos en ese sueño, culmina cuando en las puertas de lo oscuro, habian dos muñecos de trapo diciendome a gritos que me fuera de ahi antes de que me atrapen y me pase lo mismo que a ellos, quienes eran dos compañeritos mios de esa catastrofe del acto de primaria.



Siempre ayuda escribir.

Gracias y perdon.